Cantabria es el lugar soñado de miles de amantes del turismo rural y las bellezas naturales. En este sentido, si se trata de descubrir rincones excepcionales mientras haces ejercicio, no puedes dejar de disfrutar las rutas de senderismo que ofrece esta hermosa comunidad autónoma.
El senderismo en Cantabria cubre todas las expectativas para diferentes niveles de experiencia y predilecciones. Desde las rutas que puedes recorrer con más facilidad hasta las que demandan mayores esfuerzos y experiencia previa.
El senderismo en Cantabria constituye una propuesta múltiple imposible de rechazar, porque tiene impresionantes cascadas, rutas cerca del mar, trayectos entre acantilados, bosques de extraordinaria hermosura o caminos entre las montañas.
La lista nunca estará completa porque son miles las opciones, pero aquí te dejamos las 12 rutas de senderismo más recomendadas por los expertos.
En el municipio de Santoña encuentras un camino emplazado en ciénagas pertenecientes tanto a esta jurisdicción como a Victoria y Joyel. Se trata de la ruta del Faro del Caballo, un encantador recorrido costero que, aparte de un paisaje impresionante, ofrece atractivos como 700 desafiantes escalones de piedra.
Si quieres conocer en su totalidad todo lo espectacular que ofrece esta ruta, tendrás que tomar la alternativa más larga, que inicia en el Fuerte de San Martín para llevarte hacia los escalones que descienden precisamente hasta el mencionado faro.
En estos casi 11 kilómetros de trayecto circular también descubrirás el Faro del Pescador y los acantilados que circundan el Monte Buciero. Te llevará entre 4 y 5 horas realizar esta ruta recomendada por los grupos de turismo de Cantabria .
La práctica de distintas rutas de senderismo se ha hecho cada vez más popular en las montañas de los Picos de Europa y, concretamente, en la región noreste del Parque Nacional, donde se ubica la emblemática ruta de Fuente Dé, un paraje asentado en el Valle de Liébana con vistas inolvidables.
Usualmente, a este lugar se llega en teleférico, lo que permite disfrutar y observar los paisajes que rodean a los Picos de Europa, como la Horcadina de Covarrobles o la Peña Olvidada. Pero tras admirar esta panorámica podrás comenzar verdaderamente la ruta desde Horcadina de Covarrobles. Son más de 13 kilómetros en un trayecto circular que atraviesas al borde del Pico de Valdecoro y la Collada de la Junciana.
Esta es, sin duda, una de las rutas de Cantabria fáciles de senderismo por su sencillez, gracias a una buena señalización que te va indicando la senda inclinada. Sin embargo, debemos aclarar que llevarla a cabo requiere de unas 5 horas, aspecto a tomar en cuenta si planeas hacerla con niños.
En el camino traspasas el fantástico Bosque de Serna y el Río Nevandi. Más adelante regresas al punto de partida: la localidad de Fuente Dé.
Situada en el Valle de Iguña, franja central de Cantabria, la ruta de la Calzada Romana de Mediaconcha brinda innumerables puntos de interés. En este caso, se dice que fue un tramo que los romanos utilizaban para el transporte de mercancías, pero más allá de si esto es cierto, estamos hablando de un camino ideal para conocer.
Sosegada y llena de sublimes resguardos, esta es una ruta que parte desde la localidad de Pie de Concha y te traslada seguidamente por la vertiente del río Besaya. Seguidamente, no dejarás de sorprenderte con una excepcional flora y unos bosques de ensueño con castaños, hayas y robles.
Un camino ascendente te lleva hacia el inicio de la Calzada Romana, en el trazado hacia Mediaconcha que pasa antes por Ventorrilo y Pequera, rodeando el Pico de San Pedro. Para el retorno se atraviesa el Camino Real de Las Hoces que, siguiendo el cauce del Besaya, te lleva de nuevo a Pie de Concha.
Los 15 km que tiene la ruta los andas en un poco más de cinco horas. Los especialistas en senderismo en Cantabria indican que esta ruta es aconsejable para personas con algo de experiencia, pues sobrepasa los 600 metros de desnivel.
En el entorno del Parque Natural del Saja-Besaya se encuentra la majestuosa ruta de los Puentes de Ucieda, que se distingue por un extenso robledal y una buena cantidad de puentes y pasarelas que franquean los arroyos. Ideal para las visitas en otoño, este lugar también presenta abedules, hayas o castaños que adquieren hermosos colores.
El punto de inicio es la Campa de Ucieda y desde el primer momento los parajes son hermosos. Esta es una ruta circular que está debidamente señalizada para atravesar el bosque, continuando hacia el Regato de la Toba. Al regresar, lo harás junto al río Bayonés.
Es un sendero por el que cruzas varios puentes de madera, observas arroyos, cascadas, saltos de agua y unos espectaculares robles. Recorres 18 kilómetros en los cuales aparecen terrenos complejos y un pronunciado desnivel, por lo que es aconsejable para senderistas con experiencia.
El túnel de La Engaña, infraestructura conocida desde la época del franquismo, le da nombre a esta ruta, con sus casi 7 km de longitud que nunca fueron utilizados y que hoy en día sufre derrumbes debido a las filtraciones. No es por lo tanto seguro atravesarlo, pero sí es perfectamente posible realizar un fantástico recorrido desde Vega de Pas.
Seguidamente vas junto a la estela del Río Yedra para alcanzar el maravilloso Arroyo de Aján, con sus diversos saltos de agua e innumerables cascadas. Más adelante te encuentras con la boca norte del Túnel de La Engaña y otro camino que te lleva hasta paisajes impresionantes.
Aparte de las bellezas naturales, esta ruta te da la oportunidad de conocer las edificaciones que se levantaron para el desarrollo del famoso túnel, que se aspiraba iba a enlazar los puertos de Santander y Valencia en el límite con Cantabria y Burgos. Allí descubres las viviendas destinadas a los obreros y estaciones de ferrocarril.
El retorno lo haces por el Río Yedra hasta Vega de Pas. Son un total de 7 horas de trayecto, es decir, casi 18 km.
He aquí una opción de aventura que muchos recomiendan con entusiasmo: la ruta por el Desfiladero de La Hermida, a un costado de Los Picos de Europa. Se trata de una hondonada 21 kilómetros de longitud, la más ancha de España, cuyas paredes verticales alcanzan nada menos que 600 metros de altura.
Este es sencillamente un destino soñado por los escaladores, así como los montañeros y amantes de la naturaleza, que encuentran aquí un enorme valor en fauna y un paisaje impactante, cuyas formas han sido moldeadas por el cauce del río Deva.
El itinerario más recomendado por los grupos de turismo en Cantabria es el que atraviesa el Mirador de Santa Catalina, que, gracias a una antigua fortificación árabe, es también conocido como Bolera de los Moros. La caminata comienza desde la localidad de Cicera en un viaje circular. Pasarás por la Riega de Cicera y más adelante enlazarás con Santa Catalina.
A partir de ese momento atraviesas una masa forestal que te lleva a una de las mejores vistas de Cantabria: la que observas desde el Mirador de Santa Catalina. Esta panorámica te da las fuerzas para empezar a descender por el bosque hasta la carretera que te traslada de regreso a Cicera. Son 5 horas de recorrido, lo que equivale a casi 14 kilómetros.
Praderas, serranías, verdes escondites y unos cordiales poblados forman parte de las sorpresas que aguardan por ti en la ruta de los Valles Pasiegos. Es una perfecta estampa que no puedes perderte, y comienza en la localidad de La Concha, donde conoces bonitas casonas de labranza y valles de pasmosa belleza como el Pisueña o el Miera, entre los cuales asciendes al paso de la montaña conocida como Alto del Caracol.
Se trata de una ruta circular que presenta un desnivel de alrededor de 600 metros, por lo que solamente los senderistas de nivel intermedio son aptos para realizarla, pero, indudablemente, los paisajes que disfrutas valen la pena.
Te llevará algo más de 5 horas recorrer esta senda de 13 km, una de las más hermosas de la región.
Ha llegado el momento de conocer la caída de agua más alta de Cantabria: la Cascada del Asón, ubicada en la zona oriental de la región, con unos impresionantes 70 metros de altura y en medio de una ruta que vale la pena descubrir.
Todo empieza en las adyacencias de la localidad de Arredondo y llega hasta el Nacimiento del Asón, en un trayecto que constituye una de las rutas de Cantabria fáciles de senderismo que puedes hacer en compañía de los más pequeños de la familia, pues tiene sólo 200 metros de desnivel con tramos que marchan junto al río y te llevan a justo al lugar donde baja la cascada.
La ruta Cascada del Asón consta en su totalidad de 7 kilómetros ida y vuelta que disfrutas a cada paso por esta comarca.
Una vista que se quedará grabada en tu mente por mucho tiempo es la del Abra del Pas, el Parque Natural de las Dunas de Liencres y la Playa de Valdearenas. Todo lo tendrás con la ruta Monte La Picota, de 240 metros de altura sobre el nivel del mar que puedes remontar con facilidad.
La localidad de Mortera es el lugar desde donde emprendes una subida sin complicaciones, a 240 metros sobre el nivel del mar y con toda la señalización necesaria. Asciendes en unos 20 minutos, y quienes ya han hecho esta ruta recomiendan que subas a la Picota al atardecer para disfrutar de las vistas más hermosas.
Otros conocedores también advierten que es mejor llevar a cabo el trayecto en primavera u otoño, pues muchísima gente ya lo conoce, por lo cual los veranos al atardecer son multitudinarios.
Si quieres descubrir un recorrido espectacular pasando por las mejores playas de Cantabria, debes realizar la ruta de la Costa Quebrada, de una belleza paisajística única, así como un trayecto corto y muy agradable.
Son 4 kilómetros que comienzan en la Playa de la Arnía y concluyen en la Playa del Madero, pero, es importante destacar que también puedes hacerla en bici y pasar por la Playa de Somocuevas, la Playa de Portio o la Playa de Cerrias, todas con vistas inolvidables.
Los amantes de la geología igualmente descubren verdaderas joyas con unas asombrosas rocas que emergen del mar. Por si fuera poco, a todas las playas que incluye esta ruta puedes llegar en coche si así lo prefieres.
La zona del Saja también presenta un recorrido que los conocedores aconsejan hacer en otoño: la ruta de las cascadas de Lamiña también conocidas como las cascadas de Úrsula.
Una buena noticia para quienes tienen niños es que es un trayecto con apenas desnivel, que inicia desde el pueblo de Barcenillas, irrumpe por un rato en el bosque y luego te ofrece una serie de lindas caídas de agua.
Eso sí: a pesar de su sencillez, lo mejor es que lleves un bastón para mejor apoyo, sobre todo en el tramo donde es necesario cruzar el río. En todo caso, se trata de una encantadora y apacible ruta que vale no puedes dejar de conocer en alguno de tus viajes a Cantabria.
Esta opción te invita a adentrarte en el corazón de los Valles Pasiegos. La ruta del Churrón de Borleña consta de sólo 5 km de ida y vuelta y comienza en la Bolera de Borleña con poco desnivel que te irá llevando a una preciosa cascada de 20 metros, la cual se precipita desde lo más alto de la roca.
Se trata de una ruta con mucha humedad, por lo que si la visitas tras las lluvias encuentras gran cantidad de barro y algo de dificultad de iluminación. Por ello, los expertos en senderismo en Cantabria recomiendan que vayas en la época de primavera o unas semanas después de la temporada de lluvias.